La Costa Azul es una región costera del sureste de Francia. Bordeada por el mar Mediterráneo, es famosa por sus «croisettes» y por su hermoso sol. De hecho, es el lugar ideal para pasar unos días de vacaciones paseando por la playa, a orillas del mar o en los pequeños pueblos pintorescos de las alturas. Estas vacaciones idílicas pueden ser aún más relajantes si descubre las maravillas de la región con un chófer privado. De hecho, hay mil y un sitios por descubrir. Si quiere disfrutar de las vistas sin tener que estar pendiente del tráfico en las pequeñas carreteras que cruzan la costa y la campiña circundante, lo mejor es contratar a un conductor privado.
La orilla del mar
De Mónaco a Cannes pasando por Niza, la carretera que bordea la costa es una visita obligada para todos los visitantes. Le espera una vista despejada del mar, dividido entre playas y escarpados acantilados. Mirando hacia el interior, en cada una de las ciudades que atraviese, podrá apreciar la belleza de la arquitectura, como las coloridas fachadas de Mónaco, por ejemplo. Deténgase en el mítico puerto de Saint-Tropez. Déjese llevar por el encanto de las casas de Menton o la Villa de Rothchild en Saint-Jean-Cap-Ferrat. Pasee junto al mar por la Promenade des Anglais en Niza. Por último, aproveche su visita a Cannes para ir de compras en algunas de las boutiques de los mejores diseñadores. Las ciudades costeras de la Costa Azul no son amigas de los coches. Pocos aparcamientos, calles estrechas y mucha gente dificultan los desplazamientos. Un chófer privado puede quitarle la molestia de conducir en la ciudad.
El interior
La Costa Azul también brilla por sus recónditos pueblos que se asoman orgullosos al mar. La ciudad de Grasse, famosa por sus perfumes, es un paso fundamental en el descubrimiento de la región. El pueblo medieval de Èze, situado sobre un saliente rocoso, es sin duda uno de los lugares más magníficos de la Costa Azul, al igual que Gourdon y Coaraze, ambos clasificados entre los pueblos más bellos de Francia. Saint-Paul-de-Vence, con su campanario cuadrado, es también una buena elección para los amantes de las ciudades históricas. Estos amantes también deberían visitar a toda costa Fayence. En cuanto a los coleccionistas de arte, irán primero a Mougins, famoso por haber acogido a numerosos artistas como Picasso, Fernand Léger y Edith Piaf. Además, los talleres de los artistas hacen honor a este patrimonio.
Ante tanto esplendor, es difícil conducir sin distraerse. Por eso, para aprovechar al máximo las visitas, lo mejor es recurrir a los servicios de un chófer privado en la Costa Azul. Además, las carreteras de esta región no siempre están bien señalizadas y no es raro perderse. Los chóferes de Kingdom Limousines conocen los lugares más buscados y le llevarán sin ninguna dificultad.
La Costa Azul es uno de los destinos más bellos de Francia. La variedad de sus actividades permite satisfacer a todos los curiosos, desde los aficionados al ocio en la playa hasta los exploradores culturales o históricos. Desde parajes naturales hasta pueblos medievales, la Costa Azul lo tiene todo. Para aprovechar al máximo su estancia, un chófer privado puede aconsejarle y llevarle a los lugares más importantes o confidenciales. Con los coches con chófer de Kingdom Limousines, no perderá ni un momento y disfrutará de viajes a su medida sin tener que preocuparse por las molestias de salir a la carretera o aparcar el vehículo.
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